Espléndida construcción medieval levantada en lo alto de una pequeña colina, en un primer tiempo totalmente aislada y después abrigada por las casa que se fueron construyendo a su alrededor.

El Castillo de Pallargues es de planta irregular, formado por tres polígonos de dimensiones distintas en los que encontramos repartidas sus diversas estancias.

Destaca del edificio, el magnífico arco gótico de 13 m. de altura, sus amplias salas con dilatados ventanales, como la sala noble y todo el resto de cálidas estancias: el antiguo dormitorio, la capilla, la bodega...

El Castillo de Pallargues ganó el Premio “Catalunya Nostra” que otorga la Fundación “Castells Culturals de Catalunya”, por su gran esfuerzo en la rehabilitación, uso cultural y conservación de la fortaleza.

El propietario del castillo en el año 1315 era Berenguer de Rajadell y con el tiempo perteneció a los señores de Concabella, la familia Argençola y los Rocabertí, siendo la familia Rovira la actual propietaria.

La construcción destaca, en su aspecto exterior, por su fachada principal, con  una arcada gótica de 13m. de altura y un torreón cilíndrico en una esquina. Una vez dentro, en la planta baja encontramos las cuadras; la antigua sala de la guardia y las bodegas. La planta noble está presidida por la sala de los capítulos, espacio sobrio y elegante, de techo altísimo, por el que se accede al antiguo dormitorio y a la capilla de San Miguel.

Para visitantes curiosos: el patio con escalera de caracol que conduce a la prisiones subterráneas; el pozo de hielo; la bodega y el sistema de canalones encastrados en la piedra para recoger la aguas pluviales.